Este fin de semana tres personas, un adolescente de 15 años y dos jóvenes de 25 y 28 años perdieron la vida por inhalación de monóxido de carbono, en dos sucesos diferentes.
El primer caso sucedió en Colastiné Norte y por el mismo hecho un hombre de 42 años -padre de la víctima-, permanece en el Cullen, en grave estado por un cuadro de intoxicación.
Este domingo por la mañana en el complejo Los Eucaliptos Lagunas del Solar, padre e hijo fueron hallados desvanecidos en el interior de la vivienda en la que habitaban. Los profesionales que revisaron a ambas víctimas constataron que el adolescente, Roberto Carlos Miño de 15 años había fallecido como consecuencia de la inhalación de monóxido de carbono. El padre del menor, Juan Carlos Miño de 42, logró sobrevivir, recibió asistencia respiratoria mecánica y quedó internado en estado delicado en la unidad de terapia intensiva del nosocomio público.
En tanto en la tarde del sábado se conocía la triste noticia del hallazgo sin vida de dos jóvenes de 25 y 28 años, en el interior de un departamento a metros de La Peatonal santafesina. Ellos fueron identificados como Fiama Marianela Schneider de 25 años y Gianfranco Emanuel Segovia de 28. El diagnóstico provisorio es que la muerte fue por inhalación de monóxido de carbono.
Cómo prevenir las intoxicaciones por inhalación de monóxido de carbono
El Ministerio de Salud del Gobierno de la Provincia, a través de la Dirección de Promoción y Prevención, brinda recomendaciones para prevenir intoxicaciones por inhalación de monóxido de carbono.
En este sentido, la responsable del área, Analía Chumpitaz, recordó que “se trata de un gas tóxico que se origina por la combustión incompleta de gas natural, gas licuado, kerosene, carbón, leña, nafta (en motores de combustión), madera, papel y aceite, entre otros. No tiene color, olor ni sabor; y su inhalación provoca daños en el sistema nervioso central, asfixia y consecuencias irreversibles, incluso la muerte”. Por eso, indicó que “hay que ventilar la casa, aunque haga frío, a través de una puerta o una ventana entreabierta. Comprobar que los ambientes tengan ventilación al exterior, encender y apagar los braseros y estufas a leña siempre fuera de la casa; y no dejar braseros, estufas ni otros artefactos encendidos durante la noche”. Finalmente, Chumpitaz remarcó: “Se debe controlar que la llama de los mecheros sea de color azul ya que si es amarilla produce monóxido de carbono. En ese caso, hay que apagar el artefacto inmediatamente y hacerlo reparar por un gasista matriculado. Además, se recomienda no instalar calefones catalíticos en dormitorios y controlar que el conducto de evacuación al exterior de gases no esté obstruido, abollado o desconectado”.
Síntomas
Las mujeres embarazadas, las niñas y niños pequeños, las personas mayores y las que sufren de anemia, problemas del corazón o respiratorios, pueden ser mucho más sensibles al monóxido de carbono.
En cuanto a los síntomas, pueden presentarse en distintas combinaciones, tales como confusión, mareos, dolor de cabeza, zumbido de oídos, náuseas, vómitos, palpitaciones, parálisis, convulsiones.
Cómo proceder
Los síntomas de envenenamiento con monóxido de carbono no se deben ignorar, especialmente si más de una persona los presenta. En ese caso se recomienda:
* Dirigirse inmediatamente a un lugar donde pueda respirar aire fresco.
* Abrir las puertas y ventanas, apagar los aparatos que utilizan combustibles y salir de la casa.
* Dirigirse al Centro de Salud o a la guardia del hospital más cercano y comunicar al personal que se sospecha de envenenamiento con monóxido de carbono.
* De ser necesario llamar al servicio de emergencias 107.